lunes, julio 30, 2007

Fundación YPF subsidiará a Pymes con proyectos productivos

Con el objetivo de brindar apoyo económico y transmisión de conocimientos a proyectos productivos, la Fundación YPF implementó el programa Energía Productiva. A través de esta iniciativa, se subsidiará a Pymes que presenten planes generadores de empleo y que demuestren una orientación al desarrollo regional.




La Fundación YPF lanzó el nuevo programa Energía Productiva, que convoca a organizaciones sin fines de lucro y a pequeñas y medianas empresas a presentar proyectos productivos que deberán ser sustentables, replicables y generar impacto social en la generación de empleo y la mejora de las condiciones de vida de sus respectivas comunidades.

Para el desarrollo de los proyectos ganadores, la Fundación YPF entregará subsidios de hasta $150 mil para cada uno.

Los empleados de YPF participarán, en esta oportunidad, como tutores y consultores voluntarios aportando su conocimiento y experiencia, adquiridos por su desempeño cotidiano en las tareas que realizan, en la resolución de problemáticas vinculadas al proyecto.

El programa apunta a consolidar la relación entre YPF, las Organizaciones de la Sociedad Civil, las Pyme y la comunidad, superando la etapa asistencialista para potenciar los resultados mediante un camino de sustentabilidad y de inversión social a través de la transferencia de conocimientos.

Se procura así el desarrollo de los emprendimientos productivos para la generación de empleo y el aumento del impacto social.

“Energía Productiva” abarca toda la Argentina y está dividida en 8 regiones: 1) Capital Federal y Gran Buenos Aires; 2) La Plata y alrededores; 3) Resto de Buenos Aires; 4) Córdoba, Santiago del Estero, Salta, Jujuy, Tucumán, Catamarca y La Rioja; 5) Mendoza, San Juan y San Luis; 6) Neuquén, Río Negro y La Pampa; 7) Chubut, Santa Cruz y Tierra del Fuego; 8)Santa Fe, Chaco, Formosa, Misiones, Entre Ríos y Corrientes.

Más información:
Fundación YPF
energia_productiva@repsolypf.com

Taranto: empresa modelo, familiar y argentina

Norberto Taranto, el principal fabricante de juntas de automotor de la Argentina y uno de los más importantes de América Latina visitó los estudios de Radio El Mundo. Como él mismo lo define, empezó con muy poco hace casi 30 años atrás. Hoy es titular de un grupo empresario que además se ha diversificado hacia otros productos, y constituye un modelo a seguir para las Pymes argentinas.
Defensor de la mejora continua, dialogó con Nino Fernández y Diego Mastrodicasa para Noavestruz acerca de su historia.




¿Cuál fue la clave para crecer en un país que ofrece tantos inconvenientes para la inversión, dónde las Pymes en general se conforman con sobrevivir?

Yo heredé de mi padre la profesión, él comenzó en una de las primeras fábricas de juntas como empleado. Era balancinero y después fue capataz de balancines.
Comenzó a los 22 años y luego de 10 años se independizó. Con unos compañeros pusieron una fábrica de juntas en Avellaneda, cerca de donde era mi casa.

Y yo era el pibe molesto, el único hijo de los socios que estaba cerca e iba siempre a molestar un poco a la fabrica, entonces me fui formando y comencé a trabajar en la fabrica de mi padre en la parte de ventas. Mientras hacía el secundario, trabajaba en la época de vacaciones. Y así fui formándome en ventas.

En 1980, después de haber intentado sin éxito convencer a mi padre de que ponga una fábrica conmigo, me independicé y puse una fábrica muy cerca de la que tenía mi papá. Mi viejo se quedó siempre con los socios porque consideraba que separarse era defraudarlos, ya que habían sido compañeros de trabajo de toda la vida.

En ese entonces comencé haciendo lo que no hacía mi papá. Ellos hacían juntas para motoniveladoras, grupos electrógenos mientras que yo comencé hacer juntas para el mercado automotor. Nunca tuvimos un cliente común porque hacíamos cosas totalmente distintas.

Cuando comencé en 1980 éramos 5 y el crecimiento fue muy grande. En 1987 ya éramos 150 personas trabajando en tres turnos. En ese año veníamos muy bien y teníamos la posibilidad de aprovechar los beneficios de la promoción industrial y equiparnos con máquinas de ultima generación, por eso abrimos una planta en San Juan, donde actualmente está lo principal de Taranto. Allá tenemos cerca de 400 personas trabajando.

Después, la fabrica que estaba en Avellaneda terminó convirtiéndose en la distribuidora.

En el año 92 se presentó la oportunidad de comprar los activos de Cliper que es donde había comenzado mi papá. Después en el 95 había quebrado también otra fabrica que era Figar, una de las más importantes en ese momento. Compramos también esos activos.


¿En algún momento sintió que estaba arriesgando demasiado para crecer?

Yo comencé con poco, y todo lo que se fue agregando, se fue agregando de ganancia.
Entonces ¿cuál sería el riesgo? Eventualmente, perder algo de lo ganado...
Yo me pienso morir acá, en mi país, entonces...¡voy a perder o ganar plata acá!
A veces nos fue bien, otras mal, pero el balance a través de los años siempre fue positivo.


Lo importante es haber tenido flexibilidad ante los escenarios cambiantes que hubo en nuestro país en los últimos 20 años. Tenemos que ir cambiando a medida que cambia la cosa.


En la presentación yo decía que muchas empresas se conforman con sobrevivir y me parece que es así en la realidad argentina. ¿Crecer es un buena forma de sobrevivir, en definitiva?

Como dicen, en el único lugar que el éxito viene antes del trabajo es en el diccionario. Después es trabajo, trabajo y trabajo.

Y el trabajo debe hacerse a conciencia, buscando la calidad en el producto y en la gestión.

Hoy en día tenemos a disposición muchas herramientas tecnológicas, pero cuando yo empecé mis estadísticas las anotaba en el marco de una puerta, para que no se pierdan y así durante un año. Un día ampliando los albañiles sacaron el marco y perdí las estadísticas de un año. A partir de ahí empecé a anotar en varios lugares...

Esto es apostar al crecimiento pero siempre analizando, pensando formando estrategias, tratando de que la calidad del producto sea, e ir creando una marca una imagen del producto y un producto bueno.
No es todo gestión, también es entender el producto, hacerlo bien y por sobre todas las cosas, cuando uno comienza es importante rodearse de buena gente.


Norberto, hace poco que ha obtenido su título de Licenciado en Comercialización.
¿Como hizo para tomar conciencia de la importancia de la calificación en los principales puestos de la empresa?


Constantemente a mi me pasó que la empresa me fue ganando en su desarrollo a mi desarrollo como empresario o como dueño de la empresa.
Entonces siempre fui corriendo atrás de la empresa porque se me escapaba y yo la tenía que entender y en función de eso siempre me fui capacitando dentro de lo que podía. Yo he tenido solamente un secundario hasta hace poco que me gradué como Licenciado en Comercialización.

Empecé a estudiar en el 2002 y me recibí en diciembre del 2005, hice la carrera en la UADE. Y todo comenzó a partir de que en 1998 asistí a un curso del Programa de desarrollo de directivos de Siderar. Allí vi la necesidad de capacitarse y me tomé el atrevimiento de escribir un protocolo de empresa familiar y poner como condición que para determinados puestos sea requisito contar con un título de grado y no me excluí dentro del tema...


Usted es titular de la Fundación Premio Nacional de Calidad que tuvo su evento anual hace unos días. ¿Cual es la importancia del premio?¿Las Pymes pueden aspirar a presentarse?

En el premio hay tres categorías. Las pequeñas, medianas y las grandes, están muy bien identificadas. Pueden ser productoras de bienes o de servicios.
No tenemos todavía ningún ganador de pequeña, tenemos a dos medianas, una de ellas es Micro.
Lo importante de transitar el camino de presentarse al concurso, es tratar de encuadrar bajo las bases al premio nacional a la calidad. Hay un libro que se vende en cualquier tipo de librería especializada que es la base del premio, y orienta para gestionar con calidad una empresa para lograr la excelencia. El alinearse dentro de eso para poder participar aunque uno no gane el premio hace que la empresa vaya mejorando.
El tema de la mejora y de la mejora continua, más allá del premio es un buen ejercicio.


¿Qué pueden ganar las Pymes con este ejercicio de presentarse?


Perfeccionar su empresa o su emprendimiento y después ser evaluado por profesionales formados por la Fundación. También hay una devolución: los evaluadores visitan la empresa, la analizan, y luego resaltan los aspectos a mejorar y las fortalezas de la empresa.


Nino: ¿Certificar las normas de calidad es una norma indispensable?

No es indispensable, pero sí es un buen ejercicio antes de presentarse a un premio. Aquellas empresas que hayan certificado normas ISO de calidad y de medio ambiente ya tienen más de la mitad del camino recorrido.

El hecho de estar certificado, saber lo que es una instrucción, lo que es un procedimiento, respetarlo, tener un organigrama de la empresa y respetarlo...todo esto contribuye a lograr lo que a las Pymes les resulta muy difícil: abandonar el maradonismo del fundador.

A medida que se certifican normas, es necesario formar gente que conozcan su sector de la empresa tanto como lo conoce el fundador.

El ejercicio de la delegación es uno de los ejercicios más difíciles de aprender.

Nino: Taranto ganó dos veces el premio y las malas lenguas dicen que le dieron la presidencia para que no la ganara una tercera vez...

Alineado bajo el modelo de gestión del Premio Nacional a la Calidad, el tema no es ganarlo una sola vez. Es como un equipo de fútbol, salir campeón cada 5 años es como a nosotros, los de Independiente nos gustaría salir campeones.(Risas...)

En cierta forma es lograr algo a lo que muy poca gente se anima. La segunda vez que lo ganamos nos dimos cuenta de que la primera vez lo habíamos ganamos ahí y en la segunda oportunidad lo ganamos holgados.

Entonces uno ve como enmarcado dentro de este modelo la empresa va mejorando. Para todos los que trabajan en Taranto, que participaron en este desafío es una gran satisfacción.


Norberto, quisiéramos destacar algunas frases que han surgido en esta charla como claves para el crecimiento y la consolidación de una empresa:

- Flexibilidad ante los cambios.
- Saber delegar
- Mejora continua
- Rodearse de buena gente
- Decisión
- Calidad
- Ganas de crecer
- Audacia
- Predisposición a aprender.


Falta una la dirección. Saber hacia dónde se va es más importante que la velocidad.
Si voy más rápido o más despacio siempre voy para el mismo lugar.
Es muy importante la dirección clara y precisa, y saber comunicarla dentro de la empresa.


¿Usted se considera un emprendedor?

Creo que sí, netamente..


¿Y detrás de todas estas claves hay motivaciones que exceden las económicas para llevar a cabo todo esto y llegar hasta donde Ud. ha llegado?

La autosuperación...esa es la clave, superar lo que ya hice, mejorarme, la mejora de la condición de una persona en su faz laboral o empresaria.


¿Como ve la situación económica hoy?

Creo que en cierta forma venimos con un crecimiento que es insostenible a largo plazo. Va a ser natural que vayamos a un crecimiento un poco menor. Pienso que el principal escollo que tenemos es la crisis energética.

Era muy fácil competir en los años 2002-03-04-05. En ese entonces teníamos salarios bajos, hoy ya se nivelaron y considero que estamos en los salarios en el nivel del uno a uno o un poco por arriba. Ahora tenemos que aprender a ser competitivos con salarios altos.

Pienso que la situación es muy positiva para todas las áreas productivas y para muchas áreas de servicios. En líneas generales al país se lo ve pujante.

Nuevos cursos para formar emprendedores

Hasta el 13 de agosto está abierta la inscripción. Están organizados por dinámica.SE, el programa integral que promueve el desarrollo emprendedor financiado por el Banco Interamericano de Desarrollo. La capacitación consiste en un enfoque práctico orientado a resultados, aprendizaje vivencial, estrategias de negocios y también referidos al aspecto personal de un emprendedor: desarrollo de habilidades, conocimientos y competencias.


dinámica_SE / Red de apoyo a Sociedades Emprendedoras inició la inscripción hasta el 13 de Agosto a los “Cursos para Formación dirigido a emprendedores”. Los cupos son limitados y se requiere inscripción previa.

Están dirigidos a personas mayores de 21 años que deseen llevar adelante una idea o proyecto de emprendimiento con potencial de crecimiento. Se brindarán conocimientos basados en un enfoque práctico orientado a resultados, aprendizaje vivencial, estrategias de negocios y también referidos al aspecto personal de un emprendedor: desarrollo de habilidades, conocimientos y competencias.

Los cursos tendrán una duración de aproximadamente 4 meses, con un encuentro semanal de cuatro horas y se inician el 16 de agosto. En menos de 2 años de vida del programa dinámica.SE, han sido entrenados en estos Cursos para Formación más de 700 emprendedores; paralelamente han sido evaluados 300 proyectos de negocios de los cuales 100 están recibiendo asistencia integral en sus emprendimientos, 12 ellos recibieron capital semilla.

El dictado de los mismos se desarrollará en las sedes promotoras del programa: Universidad Tecnológica Nacional, Regional Gral. Pacheco (UTN-FRGP, General Pacheco, Pcia. de Bs. As.), Universidad Nacional de General Sarmiento (UNGS, Polvorines, Pcia. de Bs. As.); Universidad de San Andrés (UdeSA, Victoria, Pcia. de Bs. As.); y en el Centro Metropolitano de Diseño (CMD, Barracas, Ciudad de Buenos Aires).

Los interesados podrán encontrar las condiciones generales y el formulario de inscripción ingresando a: Dinámica.SE

dinámica SE es el primer programa integral para la creación y formación de empresas dinámicas que se instala en el país, con el apoyo del BID/FOMIN, conformado por una red de prestigiosa instituciones entre las que se encuentra las Universidades UTN Gral. Pacheco, Universidad Nacional Gral. Sarmiento, Universidad de San Andrés, el Centro Metropolitano Diseño a través de incuBA, la Unión Industrial Tigre y la Fundación General Pacheco; Entidades donantes: BID/FOMIN, Francisco de Narváez -Cátedra Karel Steuer de Entrepreneurship –UdeSA (San Andrés), Corporación Buenos Aires Sur (GCBA), Programa Universidades del Banco Santander Río de la Plata S.A.

martes, julio 03, 2007

La crisis energética llegó para quedarse

Gerardo Rabinovich, director del Departamento Técnico del Instituto Argentino de Energía, explicó los alcances de la crisis estructural que padece la Argentina a nivel energético. Mientras el gobierno manifiesta que se trata de un problema pasajero, los estudios técnicos muestran que durante varios años nuestro país deberá acostumbrarse a la escasez de recursos. En cuanto al desarrollo, seguiremos en la vía.


Con respecto a la crisis energética hay una suerte de polémica: por un lado están los que dicen que no existe tal crisis y por el otro lado hay muchos especialistas que vienen hace tiempo alertando sobre esto. ¿Cuál es su posición al respecto?

Creo que hoy decir que no hay crisis es vivir en otro mundo; porque solamente hay que mirar los diarios que se han publicado desde mayo hasta hoy y no creo que haya ni un solo día en el que no se haya planteado un trastorno derivado de problemas en el sector energético. La falta de gasoil, la falta de gas, corte de GNC, corte a la industrias, si esto no significa que el sector está en crisis… me parece que esta discusión a esta altura ya está superada; de lo hay que hablar fundamentalmente es de cómo superar esta situación.
Primero pedirle a los responsables de administrar la cosa pública que admitan la profundidad de los problemas y ver cómo salimos de esto.


¿Usted cree que hay gente por parte del Gobierno que no admite que hay una crisis?

El Gobierno durante mucho tiempo no admitió la existencia de una crisis, esto está claro; hasta hace pocos días no lo admitía.
Los últimos días lamentablemente la situación se ha agravado, se ha profundizado por problemas que hay en los embalses en el Comahue, por problemas de temperatura, de disponibilidad en los equipos; y ya hoy el Gobierno admite que tiene dificultades.

El problema del Gobierno es que cree que estas dificultades van a pasar rápidamente y según nuestros estudios, esta crisis estructural llegó y se va a quedar un largo rato con nosotros.


Usted hace unos días dijo que tenemos nueve años de reserva de gas. ¿Eso qué significa?¿Qué tipo de restricciones deberían tomarse para que esos nueve años de reserva no se evaporen rápidamente?

Lo de los nueve años de reserva de gas es simplemente un indicador técnico para los que trabajamos en la industria, para poder saber qué es lo que estratégicamente se puede hacer con el gas. Durante mucho tiempo podemos permanecer con nueve años de gas, por ejemplo en el petróleo desde el año 90 la relación entre la reserva y la producción ha sido de 10 años aproximadamente.
¿Cuál es el limitante de este número? Que yo con 10 años de reserva de petróleo no puedo plantearme construir un refinería nueva y cargarla con mi propio petróleo porque esa refinería se tiene que amortizar en 25 años.

Entonces necesito tener (y lo mismo pasa con el gas para hacer un gasoducto) esas reservas en mi territorio para viabilizar una obra que pueda ser abastecida con mis propios recursos. Sino tengo que pensar en abastecerla con recursos importados. Lo que no me permite ese número es pensar que voy a seguir creciendo en base al gas.

Los limitantes que hoy tenemos de gas están fundamentalmente en la capacidad de producción, hoy no se está inyectando todo el gas que se podría inyectar en cabeceras de gasoducto y por otro lado hay un serio limitante en la capacidad de transporte.


Con respecto al corte de suministro en las industrias ¿qué tendríamos que hacer para mantener el nivel de reservas, sin sacrificar a todos por igual?


Hoy estamos con el problema encima, entonces hoy hay que priorizar el suministro, hay que tener una política que lo priorice.
Es decir, en situaciones de frío extremo le entrego a las casas, o hay industrias que no pueden parar, a esas no les puedo cortar porque sino pierden producción, se les arruinan las máquinas, los hornos.

Esto tiene que ser parte de una política instrumentada desde el Gobierno que defina cuáles son las prioridades tanto de la producción como de la sociedad. Hoy esa política no existe. Sólo hay una política definida muy gruesamente que es: a la gente no hay que cortarle.

Esto es elemental, porque sino arruinamos la calidad de vida de la gente; pero entonces ¿a quién le cortamos?¿cómo priorizamos ese suministro?¿cómo ahorramos?. Porque hoy por hoy, y esta es otra dimensión del problema del que no hablamos pero está subyacente, con el precio con que llega el gas a los domicilios, no tengo ninguna señal que me indique que ahorre. Y si además digo que no hay ningún problema ¿por qué voy a ahorrar?.

Yo no le puedo cortar a la gente pero necesito decirle a la gente que ahorre porque tampoco le puedo cortar a la industria o a determinadas industrias en determinados momentos en los cuales pierden producción o se le arruina equipamiento.
Entonces se debe tener una política que prevea estos problemas que son complejos. No puede dejarse librado a la mano del mercado.

Más luces amarillas en el sector del cuero

Presión impositiva, aumento de los costos y el peligro que representan las importaciones de China aparecen como los principales problemas que enfrecta el sector, que se encuentra organizando la exposición CEMCA 60. Raúl Zylberstein, presidente de la Cámara de Manufacturas del Cuero y Afines de la República Argentina (CIMA) visitó los estudios de Radio El Mundo junto a Esteban Ferrari, economista de la entidad.


¿Cómo fue la evolución de la industria en el último período?

Esteban Ferrari: Existe una fuerte recuperación después de la devaluación, y se están superando los niveles del pico anterior, que fue en 1998.
Pero el crecimiento ha sido desparejo. Algunos sectores intensivos en capital, como la siderurgia y la petroquímica, lo han hecho a tasas muy altas. Estos sectores, además de ser grandes consumidores de energía, no requieren gran cantidad de mano de obra ocupada en relación al capital que generan.

La suerte de las industrias intensivas en mano de obra ha sido algo diferente. Aunque hubo una recuperación muy fuerte en los primeros dos años, también existe una fuerte recuperación del empleo y hoy endía se han estacionado y han crecido un poco menos que el promedio de la industria.

Es aquí donde se comienzan a reflejar algunos problemas en el nivel de competitividad, en algunos casos por aumento de materias primas, y en la mayoría de las Pymes por el aumento del costo laboral. Se ve que la situación en estos sectores es mucho mas precaria, son los sectores mas retrasados de la industria manufacturera en su conjunto.

Estas dificultades que advertís, ¿se ponen de manifiesto en esos sectores que presentan conflictos o graves problemas en algunos casos como la competitividad con los importadores de China?

Esteban Ferrari: Exactamente, ese es otro factor relevante, el tipo de cambio necesario para que estos sectores mantengan el nivel de empleo, el nivel de los salarios y el nivel de crecimiento es mucho más alto que para los sectores intensivos en capital.

Todos saben que en los productos de China el costo del componente laboral es muy bajo, entonces los sectores que primeros sienten la competencia son aquellos intensivos en mano de obra. Eso se ve reflejado en los aumentos de las importaciones. Las que provienen de China han recuperado en muchos casos el nivel más alto de la convertibilidad, y en otros la ha superado.


¿Cómo influye la estructura impositiva en las inversiones?

Raúl Zylberstein: El sistema impositivo sigue siendo un engendro cada vez en mayor grado. No tiene un criterio claro, entonces no puede modelar la economía. Por ejemplo, si queremos que las empresas Pymes tomen más gente tenemos que sacarle el pie de encima para que puedan hacerlo. Recordemos que el 75% de la recuperación del empleo que tuvo el país, fue generado por Pymes.

Lo que nosotros queremos es que las empresas pequeñas y medianas sigan tomando gente, que sean competitivos y que los salarios no sean bajos salario, ya que nosotros dependemos básicamente del mercado interno.

Tomamos como ejemplo una empresa petrolera que factura un millón de dólares por cada empleo que genera. En cambio, una empresa Pyme, según cálculos estadísticos, para alcanzar esos niveles, genera 54 puestos de trabajo.

De esta manera se puede ver la presión que posee esa empresa por el lado de los salarios, muchísimo mayor de la que tiene una empresa petrolera o siderúrgica. Por eso es importante que esto sea contemplado y tratado.


La ministro de Economía afirmó que va a mantener el tipo de cambio en un nivel alto. ¿Qué opinás con respecto a esto?

Raúl Zylberstein: No es favorable que sea alto, es necesario que vaya acompañando los índices de precios por que sino tenemos inflación en dólares y cada vez más perdemos competitividad con los productos extranjeros en el mercado interno y en las exportaciones también.


¿Cómo se encuentra el sector después de los grandes problemas que tuvieron el año pasado? ¿Han evolucionado con respecto a las dificultades que existen para conseguir cuero?

Raúl Zylberstein: La situación del cuero no ha mejorado. El tema se sigue agravando porque el cuero siguió aumentando y se está exportando cada vez con menor valor agregado.

Con respecto al gobierno, ellos entienden nuestra situación nos han dicho que apoyan a la industrial curtiembre, ya que es una industria pujante.

Nosotros, para fabricar marroquinería necesitamos cueros curtidos para luego llegar hasta los pasos de elaboración final. El cuero que es exportado en el primer proceso requiere la mitad de mano de obra que el cuero terminado. Nosotros consumimos cuero terminado, de esta manera favorecemos a este tipo de industria, dentro de la industria curtidora son Pymes que nos terminan los cueros de una manera artesanal, con mucha mano de obra.

¿Cuál fue el impacto en materia de empleo, exportaciones y caídas de empresas?

Raúl Zylberstein: Se han caído algunas empresas, lo que ocasionó pérdidas de cinco mil puestos de trabajo en toda la cadena.
En esta industria, el sector que tuvo que cerrarse fue el de tapicería. Muchas curtiembres se dedicaban a la tapicería, al amparo de los reintegros altos. Convenía más exportar manufactura que cuero y aquí se puede ver un ejemplo de cómo se desarrollan e la industria cuando se toma una decisión.


¿El resto del sector esta en condiciones de reincorporar a esas 5.000 personas que quedaron sin sus puestos laborales?

Raúl Zylberstein: No tenemos la posibilidad como para poder reacomodarlos.

Esteban Ferrari: Como la cantidad de cuero se fija, el hecho de que se hayan caído empresas no quiere decir que se exporten menos cueros, sino que se exporta la misma cantidad de cueros pero con menor grado de elaboración.
Todo este proceso va generando un cambio en la estructura de exportaciones donde el cuero semiterminado se encuentra en el 50% del total de exportaciones de la cadena de valor y las manufacturas pasaron de ser en cuatro años el 25% al 15% del total.
Se ve reflejado el retroceso en cuanto al valor que se le agrega al cuero en la Argentina.


¿Qué productos se están importando de China?

Raúl Zylberstein: Esto es parte del gran problema, ya que lo que se importa de China son básicamente mochilas escolares (vinílico) y carteras (vinílico y cuero). La calidad viene en una escala de mala a regular.

Este año ingresaron, en el primer cuatrimestre, más de 5 millones de carteras. Nosotros hicimos un cálculo: En dos años vamos a llegar a los 30 millones de carteras, que equivalen casi a 1 por habitante y a eso se le suma la producción local. Esta cantidad de carteras no puede ser absorbida por el mercado y quien se ve afectado en primera instancia es el productor local que no va a poder colocar carteras por el gran ingreso de las mismas.

En segundo lugar el importador, ya que no existe un coordinación entre todos los importadores para ver cuántas carteras absorbe el mercado y cuántas traemos. Nosotros creemos que el mercado sólo puede absorber 15 millones.

Pero si tenemos 30 millones van a caer los precios al costo y por debajo del costo. Esto va a ocasionar perdidas para la colocación de la mercadería. Las carteras no van a valer nada y se van a vender en cualquier lugar.

También se verá perjudicado el comerciante por que le baja la rentabilidad al facturar menos con el mismo nivel de actividad.

De esta manera, se puede ver que toda la cadena comercial se ve perjudicada por esta cantidad indiscriminada de importación, lo que nosotros llamaríamos un suicidio, un mal negocio.


¿Cómo va la organización de la exposición CEMCA 2007?

Raúl Zylberstein: Es la realización numero 60 de CEMCA, donde vamos a estar presentando la temporada de invierno y de verano. Esta exposición se realiza desde hace 30 años de manera interrumpida.

En esta ocasión, va a ser con mucho festejo, ya que no hubo muchas exposiciones que hayan mantenido durante tanto tiempo.

Van a ser 174 stands que se van a presentar durante el 29, 30 y 31 de julio en el predio de Costa Salguero.

¿Qué esperás de Macri?

Raúl Zylberstein: Es complicado responder, pero nosotros hemos trabajado junto con la gente de la legislatura porteña por una ley de cambio de código de planeamiento urbano, que permitió que muchas industrias dejen de estar en negro.

En esa tarea estuve como representante de la cámara, y me tocó hablar con todos los bloques. Cuando hablé con el bloque del macrismo sobre este tema, fue uno de los mejores diálogos que tuve, en comparación con los demás bloques. Se hablo únicamente del objetivo que fue llevado a cabo y me sentí muy cómodo trabajando con ellos, a pesar de que el poder ejecutivo demoró bastante todo el proceso.