Biotecnología emprendedora y argentina
En diálogo con Noavestruz, Jordan Kristoff, socio de Innovateck, emprendimiento biotecnológico dedicado a la micro propagación "in vitro" de especies vegetales, contó que a mediados de 2008 la empresa estará en condiciones de sustituir las importaciones de Aloe Vera, que hoy suman más de 800.000 dólares anuales.
Innovateck es parte de un programa de incubación de empresas tecnológicas y ha sido premiada por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y Banco Río.
¿Qúe es Innovateck y a qué se dedica?
Es una empresa de biotecnología vegetal que se dedica a ofrecer servicios sobre la micro propagación "in vitro" de especies vegetales, control de calidad y control de trazabilidad.
La micro propagación "in vitro" es una técnica sumamente importante para el desarrollo agropecuario de un país, porque permite generar rápidamente y con excelente calidad, una gran número de ejemplares vegetales y escoger los mejores genotipos de esos ejemplares.
¿En qué casos se recomienda la utilización de esta técnica?
La micro propagación "in vitro" es interesante para especies vegetales que por diferentes características ameriten ser micro propagadas porque su proceso natural tiene inconvenientes.
¿Inconvenientes de qué tipo?
Por ejemplo cuestiones climáticas, o porque el sector agropecuario de ese país, por cuestiones culturales y de tradición, no genera esas plantas. En la Argentina está pasando eso, ya que tiene todas las condiciones necesarias para ser un excelente exportador de Aloe Vera. Sin embargo, importa el cien por ciento de gel de ese vegetal que utiliza.
¿Para qué se usa el gel de Aloe Vera?
Actualmente, se está usando en la industria cosmética y farmacéutica. Es una especie que se viene estudiando desde hace más de dos mil años, los egipcios ya la conocían. Pero día a día los estudios científicos corroboran los potenciales efectos medicinales que tiene la planta. Por ejemplo, sirve para mejorar la calidad de la piel o para evitar la caída del pelo.
El Aloe Vera es la planta terrestre con mayor cantidad de aminoácidos y hay millones de ejemplos de propiedades curativas realmente asombrosas. Si bien en la Argentina hay una idea “un poco esotérica” con respecto a sus propiedades, lo importante es que cada vez tiene más demanda en el mundo.
Decías que se importa íntegramente el gel de Aloe Vera ¿Cuánto está importando la Argentina en este momento?
El dato más reciente, que va del 1º de enero de 2006 al 15 de enero de 2007, indica que hubo una importación de 154.065 kilogramos que equivalen a más de 800 mil dólares. Y eso, en parte se genera también porque la Argentina todavía no tiene una reglamentación para un uso adecuado del vegetal.
Estos 800 mil dólares de importación de gel de Aloe Vera son para los productos cosméticos, que son los que contienen un pequeño porcentaje de Aloe Vera. En Estados Unidos y en Europa, ya se está imponiendo una legislación que establece que para que se diga que un producto tiene Aloe Vera, tiene que tener, por lo menos, entre el cuarenta y el cincuenta por ciento de la planta. Entonces, cuando llegue acá esta reglamentación, la demanda va a aumentar en un cincuenta por ciento.
Volviendo a Innovateck ¿En qué estadío se encuentra la empresa?
En 2005 ganamos un premio otorgado por la Dirección de Tecnología del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y a partir de eso, nos constituimos como una empresa que ofrece servicios de biotecnología vegetal, puntualmente para variedades en extinción, que ameriten ser generadas rápidamente en una gran cantidad de ejemplares.
Lo que hacemos es tomar un ejemplar, clonar su tejido celular y, por ejemplo, en seis meses, hacer de una planta, mil quinientas o dos mil. Las cantidades cambian según la variedad, incluso en algunas es más rápido todavía.
A largo plazo ¿se plantean producir el Aloe Vera a través de esta tecnología?
Si bien somos una empresa de biotecnología vegetal, hemos conseguido, a través de diversos premios que hemos ganado y de la calidad de los plantines de Aloe Barbadensis Miller que hemos generado, una posición estratégica que nos permite el desarrollo de la sustitución de la importación del gel de Aloe Vera con muy buenas perspectivas.
¿En cuánto tiempo?
Nosotros creemos que a mediados de 2008 vamos a estar en condiciones de sustituir las importaciones. Es importante aclarar algo: hay más de 400 especies en la gran familia de los aloes.
Aloe Vera viene del latín y quiere decir "aloe verdadera". Una cuestión cultural, hace que en la Argentina creamos que el Aloe Vera es esa plantita carnosa de pintitas que en verdad se llama Aloe Saponaria.
Es una planta que, si bien tiene propiedades y es buena, no es el Aloe Vera que se usa, se consume y se demanda a nivel mundial. Muy a nuestro pesar, en Córdoba y Santa Fe ha habido malas experiencias por plantar esta variedad que era la inadecuada.
Nosotros, después de un estudio de todas las variedades, pudimos generar los mejores ejemplares de la variedad más requerida a nivel mundial que es Aloe Barbadensis Miller.
Mucha gente piensa que a través de esta tecnología muchas veces se logran productos nocivos. ¿Qué dice al respecto alguien que está en la “cocina” de la biotecnología?
La biotecnología es el resultado de un proceso de conocimiento científico que se fue desarrollando y alcanzó logros que están al servicio de la generación de riqueza humana y de riqueza material. Como todas las cosas, pueden hacerse bien o mal.
En la biotecnología, subyace un conocimiento que le da valor agregado a un procedimiento. Lo que realmente destaca a un país y lo posiciona en una situación estratégica importante, es que su población le de valor agregado a las cosas.
La humanidad hace cuatro mil años empezó con la agricultura, y es a partir de ese desarrollo, es decir, a partir del conocimiento de una relación simbiótica entre el Hombre y una especie vegetal, donde el humano como especie, consigue una adaptación realmente asombrosa. Creo que la biotecnología es una forma de seguir avanzando en el conocimiento cultural.
Cuando entramos al negocio del Aloe Vera quisimos ser productores de Aloe Barbadensis Miller, que es la variedad que más se usa. Tratamos de conseguirla pero en el país no había. Intentamos importarla, y, obviamente, la gente de afuera nos quería vender el producto terminado, el gel, no la planta. Y ahí es donde la biotecnología muestra un claro ejemplo de eficacia. Por suerte conseguimos en un vivero en Buenos Aires, a un japonés que tenía una planta guardada que se la habían traído sus abuelos desde Japón, y a partir de esa planta, que además era un ejemplar genotípicamente muy bueno, pudimos generar mil quinientas, dos mil plantas...
La planta original hace las veces de matriz, a partir de ahí se logra la micro propagación, ¿no es cierto?
Cada variedad vegetal tiene una técnica diferente; se extrae tejido celular de una planta y se genera de un ejemplar, cuatro individuos, de cuatro, dieciséis y así logarítmicamente, en poco tiempo se llega a un número de ejemplares realmente asombroso.
Creo que la biotecnología, permitirá sustituir la importación y exportar Aloe Vera, para generar riqueza interna y no “darle de comer a los de afuera”. Lo mismo para especies y variedades en extinción, o para orquídeas, arándanos…
Recordemos lo que pasa con la soja y el rendimiento que está teniendo en la Argentina y los ingresos que permite embolsar. ¿Además de acelerar la producción, qué otros beneficios y ventajas tiene la biotecnología?
Muchísimas. En el caso de Innovatek, que usa micro propagación in vitro, tiene la ventaja de aumentar el número de ejemplares, mediante el control de su calidad y seleccionar los mejores para micro propagarlos. La diversidad hace que no todas las plantas rindan igual y, a través de la biotecnología, se puede manejar eso.
¿Comparte el diagnóstico de mucha gente que dice que la Argentina tiene un gran potencial de desarrollo en biotecnología?
La Argentina tiene una condición que hay que saber aprovechar, además del tipo de cambio que sirve para la importación y la sustitución de importaciones: La calidad de sus recursos humanos.
Además hoy en día, hay apoyo para los emprendimientos. A nosotros nos apoyó el Gobierno de la Ciudad y también el sector privado...
Recordemos que obtuvieron el premio Nexo Emprendedor de Banco Río, que en algún momento se mencionó en este programa…
Sí, el Grupo Santander realmente nos apoyó mucho, con criterios de evaluación muy exigentes, con los que, por suerte, nos fue bien.
La Argentina tiene un conocimiento científico y cultural, a través de sus universidades, que hay que saber aprovechar. Los jóvenes estudiantes tenemos que seguir capacitándonos y poniendo nuestra energía para generar riqueza cultural y material.
¿Qué escollos encuentran, de cara al futuro, como microemprendimiento?
El principal problema que tenemos ahora es que, cuanto más valor agregado y más cadena de valor se quiere alcanzar, más capitales se necesitan. El desafío que tenemos es la búsqueda de más capitales. Por suerte, estamos en una posición muy buena. Al tener en el horizonte negocios tan rentables y tan cercanos, y los premios que ganamos, queremos ir por más y presentarnos a ruedas de inversores para alcanzar más negocios.
En el caso del financiamiento que lograron a partir del premio de Grupo Santander fue como capitales semilla ¿Qué tipo de inversiones recibieron por ese lado?
Todo el capital recibido lo aplicamos a equipamiento.
¿Fueron inversores externos o del propio Banco?
Fue el mismo Grupo Santander, y en el otro premio que ganamos, fue el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, que realmente apostó a proyectos de innovación de una forma muy buena, con criterios de selección muy exigentes.
¿Creés que debería haber más apoyo de los organismos e instituciones estatales a emprendimientos como los de ustedes?
En el Gobierno de la Ciudad hay una muy buena actitud. Por supuesto que se puede hacer más. Lo que falta es mayor exigencia en la formación del conocimiento. A diario se ven excelentes ideas en gente común. Estas personas tendrían que exigirse a ver a quién le van a vender lo que están pensando. El humilde consejo que quiero dar en este sentido es que prueben. Digan “quiero ejecutar esta idea”, porque la verdad es que he escuchado cientos de ideas maravillosas, que por una cuestión, quizá de vergüenza o miedo al fracaso, no se implementan.
¿Cómo llegaron ustedes a conocer los programas de apoyo para microemprendedores? Porque muchos no se enteran por falta de información.
Eso es muy cierto. Mi socio usó su tiempo libre para buscar cosas por internet, que es una fuente importante para llegar a los recursos. Tengan en mente que el fracaso es no intentarlo.
1 comentario:
hola, interesante la nota. me gustaria saber como contactarme con esta empresa.
Andrea
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